Habiendo sido diseñada para fundirse con el ambiente de granja lechera en el que se encuentra, esta casita de baños de 25 metros cuadrados está llena de toques rurales. Desde los contenedores metálicos que hacen las veces de macetas para flores hasta el interior que recuerda a un granero, en Point Reyes uno puede darse a la verdadera vida campestre. Es difícil, de hecho, imaginarse un lugar más mono y con un aspecto más cómodo que éste.
Diseñada por Richardson Architects, la casita de baños está pensada para albergar a grandes grupos de niños durante campamentos de verano. Con un porche que rodea toda la casita, y gracias a los bancos, la mesa y las sillas y la gran pizarra, ¡hay mucho más que hacer en esta casita de baños que bañarse! Echen un vistazo a lo que queremos decir en las fotos que aparecen abajo:
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El porche, de gran tamaño, te invita a sentarte y relajarte, con una pizarra lo bastante baja como para que los niños puedan dibujar o jugar a la "escuela".
La casita tiene su propio dormitorio, además de las tiendas de campaña disponibles en los alrededores.
El baño, centro de la casita, puede verse abajo, con las duchas estilo caseta de playa. Los estantes a la entrada permiten mantener todo ordenado mientras los niños se duchan. ¡También hay suficiente espacio para lavar los platos!
La casita de baños se sitúa entre varios edificios en una granja, y se funde a la perfección con sus aires de encanto campestre. Es un sitio perfecto para sentarse y disfrutar de una limonada por ejemplo.
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